jueves, 27 de mayo de 2010

Diarios Lost



LA CHINA

Es difícil comenzar a hablar de lost. el simple nombre lo dice todo. Me sorprende en cantidad industrial el eco, fenomeno, revolución de masas, como queramos llamarlo, que ha desencadenado esta serie. debo decir, que para mí se lo ha ganado a pulso, capítulo a capítulo, escogíendo un argumento perfecto para el debate y la confusión, una fuente inagotable de idéas, algo cercano por no decir inherente a cada persona. El sentimiento del bien y el mal. Jugando con el hasta el punto de retorcerlo, una mina de ideas que surgen a lo largo del argumento de la serie que pasan por lo científico, lo social, lo interracial, lo religioso, lo moral. Nos tocan a todos queramos o no, con un toque realista pero constructivo, me encanta todo el halo de misterio que envuelve a Lost, y a todos los actores cada uno es perfecto en su papel, todos son irremplazables. Quién no querría conocer a Sawyer, beberse unas cañas Dharma con él.. o arreglar una camioneta hecha añicos sólo por diversón con Hugo quién no iría allí y ayudarí a Clare a que no se volviera tan loca... QUIEN NO LE DARÍA UNA BOFETADA A KATE POR NO QUEDARSE EN LA ISLA CON JACK.

En fin.. todo me ha parecido excelente, pienso que no podía ser ni más ni menos que como ha sido. Creo que sinceramente la serie, más concretamente, la isla, es un cliché social... con el que soñamos? nos sentimos perdidos o.. queremos estar perdidos

No hay que olvidar, que todo lo que ocurrió en la isla fue VERDADERO, el final, es algo evidente, que no podía ser de otra manera se me ponen los pelos de punta cuando recuerdo la mirada de Lock al perdonar a Ben , antes de entrar a la iglesia... o cuando Kate recibe por segunda vez a Aarón, junto a Clare... por no hablar de el papelazo de Charlie en esta temporada, actuando siempre con esa seguridad infinita , esa certeza absoluta en algo al igual que Desmond, conociendo desde el principio lo que ha ocurrido.. "not Penny's boath" todo me parece increible, casi místico.. con un aire de Secta que atrapa desde el principio. Es, y espero que no por mucho tiempo la mejor serie creada hasta ahora! Gracias a Damon Lindelof y JJ Abrams por tocarnos la moral. A más de 76 millones de personas...Al final parece que vivimos juntos... y morimos juntos también. nos encontraremos en algun punto al final. con todos quienes nos han marcado? Es agradable pensar que sí.

JULY

NAMASTE. Son más de la 9 de la mañana del día 24 de mayo, fin de perdidos, salgo del portal de la residencia de Jaime, nos hemos estado fumando el ultimo porro despues de ver un nuevo capitulo de perdidos, sensacion agridulce,almenos para mi… El sol me deslumbra,Tio ¿Dónde estoy? ¿Cuántas personas con las que me cruzo habran visto el final de Lost?, pocas seguro. Hace mas de 24 horas que me desperte en un 23 de Mayo a las 8:15 solo para escuchar una cancion: “Make your own kind of music” de Mama Cass y sentir la sensacion que sentiria Desmond al despertarse cada mañana y salvar la isla/mundo o seguir durmiendo y que le jodan. Lo que hagas tendra repercusion en esta vida y en las otras. Dharma y Karma. Todos podemos ir en el 815 de oceanic o en el Ajira 316 o que naufrage nuestra patera ¿cuantas de las personas con la que te cruzas cada mañana pueden ser importante en el futuro?, aunque nunca lo sepas que lo fueron… La isla es un gran Macguffin de camino interior o exterior, una etapa mas de nuestro samsara hacia el nirvana, simplemente hay que encontrar a nuestra constante, nuestro yin-yan, nuestro complementario entre una lucha de Bien y Mal a lo largo del tiempo. El humo negro consigue lo que quiere, salir de la isla, cuando mueres comienzas una nueva vida, un nuevo camino…

Quizas el mundo todavia no este preparado para un humo negro, gris, bueno y malo a la vez (ya que solo quiere salir de una isla en la que lleva atrapado mucho tiempo). Su vida en el exterior seria completamente normal, no normal no, especial, él difrutaría de cosas que nosotros ni siquiera apreciamos… solo es una serie, despues de esto no habra ningun tipo de revolución y todo seguira igual, pese a que yo piense que ahora empieza la leyenda negra de Lost, el Destino no quiera que pase eso, no conozco a el equipo de rodaje ni a los actores pero tienen que ser buena gente. La leyenda negra de Lost seria que ahora empezarian a suceder cosas estrañas; asesinatos ,superpoderes, desapariciones misteriosas, abducciones,lobotomías,peregrinaciones, aparicion de divinidades extrañas, electrosock, la Cia, sectas… etc etc. Esto solo es imaginacion mia, tengo sueño. Hoy a sido un gran día o ¿lo esta siendo?

Podria escribir un monton de lineas hablando de Lost, recuerdo la primera imagen que vi perdida en algun flashback de mi vida, hace 5 años y tambien he recordardo en algun flashfoward los momentos vividos ahora y otros muchos…
Fate.

Mi constante me esta esperando.

Acho nos veremos en la otra vida…

Desmond J. Thompson

25 de Mayo 1:08
(solo es una hora cualquiera)

X
Desde luego el destino
finge una compostura de ajedrecista amnésico
que ha extraviado la vista en el tablero.
Desde luego tampoco has advertido
cuánto de mal sorteo
hay en tu personaje.
Mejor no busques objetivos.
Mejor cierra los ojos
y fia en tu memoria-mapa en blanco-
el penultimo turno del acierto,
la justeza de un tiro que hiere a quien dispara.

XI
Descansa. Exhala el humo.
Nos has de contribuir
a la fugacidad. Depón tu lanza.
Piensa en la compañía de una silueta hermosa

tras el filo curvado de la mesa.
Aparta tu mirada y acaricia
tus recuerdos más tibios.
Antes de medir fuerzas con la suerte
quizas no sea inutil
el debil talismán de lo vivivo.

(Andrés Neuman, “El Jugador de Billar”)

ALBERTO

Finales alternativos. A las nueve de la mañana, camino de la facultad, me doy cuenta de que no tengo sueño. No tengo ganas de tirarme a la cama y dormir. Adelanto que este pensamiento perdura en mi mente hasta que llego a mi clase y me siento y la profesora comienza su explicación: entonces el cansancio regresa a mi como si mi cuerpo fuera lamido por una marea espumosa, y sueño con mi cama, en la que soñaré el final que hubiera querido ver. (Adelanto que para olvidarlo conforme habrá los ojos y se de cuenta que ha dormido una imperdonable siesta de tres horas).

Lo más reseñable de hoy es, por desgracia, la noche de ayer: la noche antes del capítulo. Entonces este párrafo debería comenzar de otra forma. Volvamos al origen, apertura de un único ojo de pupilas dilatadas y… Previously, in my life: La A-radio. Flanger Recods. Cables. Los problemas del directo. La introducción al libro de poesías de Jaime. El terrible descubrimiento. Condenamos al TDT. La huida al alba cruzando las calles empapadas de un sudor nocturno, dulce. El amanecer me record una esponja estrujada. Recuerdo esto ahora. La residencia, en silencio azulado. El capítulo. Aquí acaba lo más reseñable a las ocho de la mañana del 24 de mayo de 2010. El capitulo ha terminado y me miro al espejo y sin creerlo creo que no puedo creerlo.

Jaime ha llamado, les confirmo a los demás, a Bellot, a la China, a July, a Oce, al somnoliento Prado que apenas ha dicho nada, a Javi, que mastica galletas, todos aun se mantienen sentados (en el caso de Oce, tumbado en el suelo) en medio del salón. La televisión aun está encendida: en ella, un debate que imagino ridículo. Apagar la tele, vámonos. Hay empanada para desayunar, en la mesa.

Debate apresurado en medio de la Rúa. Jaime y Diego aproximándose por la calle. Estudiantes que se encaminan a Libreros o Zacut para reservar sitio. Colillas que son pateadas con saña, repetidas veces. Noto que mi cuerpo huele a una mezcla entre pomada para la piel y polvo de tabique recién derribado.

No tengo ganas de escribir este maldito diario. Me diréis que fue idea mía. O no me diréis nada. Empiezo a recibir vuestros fragmentos. Ya he leído el de July y el de la China. Espero los demás en breves horas. Y yo no tengo nada aun, no quiero escribir nada porque el capitulo no me ha gustado. Reconozco una cosa: hacía semanas que preparaba este diario, ¿sabéis? Jejejejeje, sí, imaginadme, horas y horas pensando en como estructuraría ese diario, los capítulos que iba a redactar tocado por la máxima inspiración, jajajajajja, me muero de la risa, iba a escribir no un diario de mierda sobre el último episodio de mierda de la mejor serie que he visto en mi vida. Mi humor es inestable y ya he soñado que rompo la cara a un heavy, he tenido un flash de la escena cuando lo he visto desayunar con un tampón sanguinolento de papel higiénico obstruyendo uno de sus orificios nasales… Esa cara de vaca hindú, esa barbita rala recortada con obsesión, una obsesión frente al espejo, con cara de furia impostada, que ahora imagino y me da una arca-cagada… le destrozaba la cara como Jacob le destroza la cara a su hermano Némesis (Jaime dice que le iban a bautizar como Samuel), como Sawyer a Jack en The Incident Part II, como Desmond a Ben Linus en el puerto deportivo o Sayd a cualquiera de los tipos antes de torturarlos o directamente ejecutarlos…

Había pensado que organizaría mi diario del día después de la Finales Season como Charly organizó su testamento en Greatest Hits, o como Nick Hornby hizo en “Alta Fidelidad”, ese playlist de mejores canciones que deviene en un artefacto memorístico-pop; pero en mi caso, enumeraría mis cinco mejores momentos de la serie…

(que ahora, a raíz de darle vuelta al anterior párrafo, recuerdo con claridad:

· El final de la primera temporada: Locke y Jack recién reventada la escotilla, y la cámara hundiéndose hacia la oscuridad.

· Los primeros minutos de The Incident part I, ese prólogo-flashback a las horas previas a que la Roca Negra encallara en la Isla, y Jacob devorando un pescado al pie de la Estatua y la aparición del gran TItus Welliver, uno de mis actores predilectos de la serie.

· El momento en que Kate y su novio de la adolescencia, Tom, escuchan una grabación que enterraron años atrás –horas antes de que Tom sea tiroteado por culpa de Kate.

· El segundo capítulo de la cuarta temporada, “Confirmed dead”, que nos presenta al equipo científico del Kahana.

· EL mejor capítulo de la serie: “Happily ever after”. Desmond descubre en su flashside-away la posibilidad de una existencia diferente. Yo lo vi en Murcia, durante la semana santa, y esa aventura de ciencia ficción como salida de la mente de Philip K. Dick condensó varios pensamientos que me rondaban durante aquellos días de desorientación.

Descubro entonces que Lost me ha emocionado con máxima intensidad cuando ha sabido explicar misterios de la vida real, cotidiana, que identificamos por su proximidad, y darlos una respuesta superior a nosotros mismos y sobre todo, a nuestra imaginación, metafísica, estimulante, que siempre dejará un hilo sin coser, una nueva respuesta que devorar y ansiar).

¿Cuántos dientes astillando uñas diez minutos antes del desenlace de Lost? ¿Cuántas lágrimas que se guardan como La Lágrima Que Lloré Aquel Día en Japón, lágrimas que empapan un bastoncillo que es confinado para la eternidad, al otro lado del mar, en una isla, en un bote cuyo tampón, quizá, contenga la esencia de la existencia de esa adolecente japonesa que llora y escribe de forma instantánea, en un su blog que está llorando al ver a Charly recordar su existencia junto a Claire y el recién nacido Aaron, y se le ocurre algo mejor, enciende la cámara de su portátil y se graba llorando de felicidad y luego cuelga el video en un foro del que es seguidora, inaugurado por un tipo de Berkeley, California, al inicio de la segunda temporada, y que ahora es uno de los lugares más visitados de EE.UU; el tipo de Berkeley ve el video –ha visto hace diez minutos la escena que tanto emocionó a la chica japonesa: supone que ese es la distancia temporal entre la emisión del capítulo en suelo americano y en suelo japonés. Recuerda a Faraday hablando de las anomalías que, como una circunvalación, rodeaban la isla. Recuerda a Desmond completamente desorientando, citando a Radiohead en The Constant- de la chica japonesa y también llora, llora al ver a la japonesa llorando y llora al traer a la mente el recuerdo de Charly, el rímel en sus ojos, como si al maquillador de Placebo se le hubiera ido la mano en el backstage, su incipiente calvicie de la que ya alardeó en Flashforward (serie en la que, por el contrario, Dominic Monaghan no sonríe con la mezcla de bobaliconería hobbit e inocencia pop propia de su estancia en la Isla), la fascinación por el prognatismo de su maxilar inferior (decididamente, tan british), la irregularidad dentadura de ratón con malas pulgas… El tipo de California cuelga el video en Youtube y escribe en el foro unas palabras que la chica japonesa recitará al coro de sus amigas que gritan y aplauden y abrazan apasionadamente los cojines de una cafetería en Tokio, y diez horas más tarde yo trasteo en la red y en el País leo un artículo de un video de una chica japonesa que grabó el momento de mayor emoción ante el visionado del último episodio de la serie?

Invento una noticia absurda sobre una lágrima que nunca podré llorar. Soy como Unamuno con Dios: quiero que el capítulo me guste, lo deseo con toda mi alma, pero es imposible. Odio este capítulo.

… enumeraría mis cinco momentos predilectos de la serie, estaba diciendo hace unas horas, y los relacionaría con diversos instantes de mi vida, como flashback (en alguno de esos puntos, precisamente el último en ser listado y reseñado, que se refería al capítulo de la sexta temporada centrado en Desmond, yo incluso llegaba a experimentar un transitorio flashside-away con la apariencia de un flashforward… algo complejo, quizá); sería una telaraña de recuerdos que ahora considero importantes porque son los primero que, instantáneamente, recupero y disfruto cuando (curiosa metáfora) recuerdo mis capítulos preferidos de la serie… Por todos los dioses de Egipto, ¿queréis leer esto? Era un dietario perfecto, repito, joder y ahora en cambio, tengo estos párrafos que no van a ninguna parte, a veces, de cuando en cuando, detengo mis dedos que ahora mecanografían enfebrecidos, y hago levitar mi mirada, la hago saltar a dos o tres líneas más arriba, mi mirada se agarra desesperada en la frase y mientras se sube a ella y desde ahí observa el resto de la página, a lo lejos, el océano indescriptible de lo no escrito, mi mirada relee… párrafos como picos de una tabla de frecuencias que son la imagen de mis pensamientos cuando recapacito una y otra vez, un bucle apocado: !!!EL ÚLTIMO CAPÍTULO DE LOST ES EL PEOR CAPÍTULO DE LA SERIE!!!

No hace falta que la mitología tenga una resolución justa, complaciente, cristalina. Así son las mitologías: simbolismo que se hunde en la oscuridad, sombras arcanas, justa interpretación desde nuestra ignorancia. La Isla no tiene explicación porque está más allá de cualquier personaje que pueda dársela.

Descubro al volver de la facultad y darme una ducha que me despeje una extraña herida en mi gemelo derecho. Cuatro puntitos de sangre coagulada, como las esquinas marcadas de un pequeño cuadrado. Me duele, pero hasta ahora mismo no me había dado cuenta del dolor. Tampoco recuerdo en qué momento de la pasada noche pude hacerme esta herida.

Comentarios en la comida. A todos les ha gustado, en mayor o menos medida, y explican que: July: “si yo hubiera estado en el equipo de guionistas, hubiera acabado de otra forma; no obstante, ha estado bien, ha sido bonito. Era lo que me esperaba desde el principio”. Jaime: “Un final plausible. Hay que leer entre líneas. Pero no se ha oído el estallido que se esperaba. También te secundo, Alberto, que el final ha sido muy comprimido, como si estuviese sido una patada a una bolsa de basura llena que no tienes ganas de bajar al conteiner, no sé si me entiendes…”; Rafa: “a mi me ha gustado”; Johana: “Brutal”.

Podría seguir la lista, pero me deprimiría. Yo sólo puedo decir:

“Decepcionante”.

“Me ha dejado frío”.

“No puedo aguantar a Ben Linus salvando a Hugo, y aun mes que Hugo diga eso de: has sido un buen número dos, Ben”.

“En fin...”

Antes de comer, leo un artículo en internet. Tengo que buscar el enlace y colgarlo aquí, para que otros lo encuentren y lo lean y entiendan mejor lo que quiero decir. Aquí está: http://pjorge.com/2010/05/24/lost-17-18-the-end/. El caso es que leo este artículo, en realidad no lo leo entero, ya lo verán cuando lo abran, lo largo que es el artículo… Leo un fragmento del artículo y pienso: quizá nuestro error ha sido ver el último capítulo de Lost y comprender lo que vemos, descubrir un sentido. Hemos visto el último capítulo de Lost analíticamente, intentando llegar cuanto antes al final para poder conocerlo, y por ello no hemos disfrutado del capítulo. ¿De verdad a alguien le ha parecido un final completamente satisfactorio?

Agoto una hora buscando más artículos. A veces los puntos más calientes y polémicos de este episodio se visten de seda y se abrochan otro sentido porque otros lo explican como si de algún tipo de lírica analítica se tratara… Nacho Vigalondo ha dice que no somos capaces de comprender el total... aunque seamos capaces de comprender el drama”.

A las tres y veinte de la tarde invento a una chica para una historia de July, mientras esperamos a que se carguen los videos del spot que hemos rodado: la chica resulta padece una enfermedad degenerativa nunca antes diagnosticada que la convierte en un mutante deforme, que únicamente posee un único orificio en todo su organismo a través del cual puede hablar y defecar y mirar y escuchar. Algo muy poético, le explico a July: una masa de carne que, cuando llora, también caga. Le digo que la chica mutante puede ser la prima del protagonista de su folletín post-apocalíptico; el personaje, una noche, para entretener a alguno de sus compañeros de viaje, recuerda a su prima, la chica mutante, y piensa en cómo hacía reír a la familia en las fechas importantes en las que la familia se reunía. Su prima era capaz de tirarse un pedo o un eructo o de reír al mismo tiempo que veía y respiraba. al mismo tiempo, y era gracioso escuchar todos esos sonidos en un único sonido. July me pregunta que qué opinará el abuelo de esto. Y yo contesto: el abuelo murió.

Me hecho la siesta. Cuando me despierto, tres horas después, estoy sudando a mares. En algún trópico crepuscular. La luz que trenza el polvo en la tarde. Las persianas bajadas, los arboles y sus roces, en el solar abandonado de enfrente. He sudado, me duele la cabeza. Recuerdo vagamente que he soñado. No recuerdo lo que he soñado. Me acerco al baño, hundo el rostro en el agua fría. Me miro al espejo de nuevo. Entonces recuerdo.

Recuerdo que he soñado el final de Lost que me hubiera gustado ver. Como rodado por mi inconsciente, como imágenes impresas en la arena de la playa, que un viento suave barre al final de la tarde y de la temporada.

Lo he soñado para olvidarlo y no volver a soñar con él, sino imaginarlo: verme obligado a escribirlo.

JAIME

El final de Lost. Después de pegarme más de 24 horas pensando en Lost, para ver el capítulo y pensando en las espectativas que llevaba: creo que el final ha sido plausible. Algo totalmente posible para el desarro de los acontecimientos que han ido sucediendo en Lost a lo largo de la serie. Nuestras mentes han imaginado otros finales, mejores, peores, lo que sea, distintos en el fondo. El final ha sido el que ha sido.

Quizás deberían haber explicado más cosas: pero ahí está lo bonito de los misterios, que siempre dejan hueco a la imaginación para especular, que en mi juicio, es una de las mejores cosas que tiene esta serie. Permite devanarse los sesos pensando en qué podría pasar –o mejor dicho, que podría haber pasado-.

El final, podría haber sido de otra manera. Se han pasado con el tema de las parejitas, haciendo que quede un poco pesado. Hubiese estado bien para un par de parejas o quizás, para un reencuentro en general con toda la gente. Demasiado americano en ese punto.

Por supuesto, la adhesión de segundón de Benjamin Linus, el mayor ratilla de toda la serie, a Hugo como “número 1”, en mi opinión podría ser algo necesario. Ben y Hugo se encuentran en la eternidad, y la conversación delata que durante su existencia, mientras Hugo cuidase la misteriosa “luz blanca” en su vida en la isla como “Jacob”, acabarían haciendose amigo de su nuevo “Richard Alpert”. Acabarían llevándose bien y ahora cuela el guiño de amigos.

Realmente creo que necesito ver la serie entera de nuevo, sabiendo el final, para fijarme mejor en los detalles. Pero al hacer memoria para buscar explicaciones a las “decepciones” de éste último capítulo, descubro que el final está muy acorde.

El tema del flashside away, podría haber acabado mejor, esa es de las pocas pegas que tengo.

No se me ocurren ahora mismo más cosas, así que lo dicho: cuando lo tenga todo asumido tendré claro el final. Resumiendo: me ha gustado.

P.D.: Me ha encantado la muerte de Jack y su trayectoria en la suerte.

BELLOT

Diario de Lost. Fueron dos (por cirscustancias ajenas) las noches que pasé sin dormir antes de que que el reloj marcase las 6: 30 am. Resultó truncado el intento orgulloso y desesperado por combatir el cierre de mis párpados: acabé viendo a trozos el final tan deseado, a la par que esas imágenes incomprendidas se adherían a mi subconsciente. Me desperté (si se puede llamar despertar) desorientado y con ganas de comerle la costura a la almohada. Es la 1:14 am, llevo despierto un par de horas y acabo de ver el último capítulo de Lost. Partiendo con la ventaja de saber que había resultado una decepción considerable para casi todos los cuerpos cercanos a mí, lo he visto bajo la cruda certeza de no idealizar mis expectativas. Quiero decir que ha acabado y no he podido evitar quedarme mas de quince minutos mirando fijamente un punto muerto, no ha sido nada reflexivo: no he intentado atar ningún cabo suelto porque he partido con la ventaja de saber que muchos de ellos se quedarán suspendidos (al igual que aquellos quince minutos), perdidos. Encontrarse en vida o en algo que la emula, que más da. La isla es el símbolo, el poder encontrarse en el momento de aislarse. Quiero hablar con Benjamin Linux, quiero preguntarle porqué no quiso entrar. Quiero que me diga qué es el amor, qué si ha sido ese el motivo por el que no ha sido capaz de cruzar la entrada. Escribo esto sentado en el sofá, en una posición un tanto dejada, aporreando las teclas del portátil con fuerza. Siento sakisajeglvks y escribo sakisajeglvks porque no puedo explicarlo. No busco a mi constante, está enfrente mía, sentada en un sillón, rulándose un cigarro y con la mirad cansada, entristecida. Me pregunta que en cuanto a lo que le dije de que "me mandará a tomar por culo de una patada" no le concierne, que la cuestión radica en si voy a ser capaz de tratarla con respeto. Quiero que Benjamin Linux me diga si yo también soy Judas. Quiero creer que algún día veré las imagenes reveladoras de amor, creer que existe una constante, hoy por hoy quiero un trago de algo frío, sentirme un poco más imbécil. El señor Christian Shepard es el nexo que ata mis pensamientos ahora con los tuyos, y me importa tres mierdas quién alzó
la estatua o porqué algunas embarazadas dan a luz en la isla y porqué otras no. ¿Quién está lo suficientemente sólo como para darse cuenta de ello?. ¿Quién busca?, todo se encuentra. ¿Quién no quiere estar en la lista de los más buscados por el FBI y a la vez salvar a tus compañeros de isla en el momento en el que te "autoinmolas"? Mis más cálidos honores para la memoria de Said Jarrah, alguién con el que jamás podría identificarme: es un asesino frío y sanguinario, hace lo que se le ordena y nunca reprocha, guarda sus males a fuego lento y sin embargo alberga energía necesaria como para saber lo que es el amor en su estricta esencia, en su autenticidad pura. Apuro las últimas verdes sensaciones de consumir este porro y me viene a la cabeza Desmond David Hume, el problema del bien y del mal, el capitán Lapidus y las ganas de mear: todo a la vez y seguido. El día 4 del 8 de 1.516 Nicolas Maquiavelo tuvo la retorcida idea de pensar que pasados 594 años después de su muerte, alguien le recordaría al asociar la época histórica en la cual vivió con una sucesión a priori absurda de numeros repetidos constantemente a lo largo de una duradera serie exitosa que produjo la ABC americana. Sarcasmo en memoria de James Ford, el chico malo no tan malo, un sucio con principios. He intentado fabricar un híbrido mental a partir de juntar detalles y rasgos de las mujeres perdidas, pero nose porqué he recordado la imagen de Charlotte con un hilo de sangre asomándose al vacío. Sólo quiero decir que la naturalidad de Claire me encanta, tanto ebria de cordura como sobria de locura. Oh gran señor John Locke, "pater putativus", tu eres el caminante, el que se arroja a la cueva sin temer la oscuridad, de tí provienen las cuerdas que atan y el misterio que te envuelve. Hugo Reyes no existe, por eso es el tio que ganó la lotería y se hizo famosamente millonario. Siempre supe que te quedarías la isla para ti Hurley. F A T E por Driveshaft
y el hombre que me arrojo una de las mejores escenas (cómo no, bajo del agua) y con la que despido este día (mañana tal vez madrugue), todo tuyo Charlie: DID YOU FELT IT?

(Fred Corock, la noche del 24 de mayo de 2.010)

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